El Valencia, con Nico Estévez como director técnico, luchó y jugó bien el partido, como hace mucho tiempo no se ve, pero no le alcanzó y terminó cayendo 3 a 2 en Mestalla ante un Real Madrid que contaba con un Ángel Di María intratable. De esta manera el equipo Che no pudo sumar de a tres en la fecha 17 de la Liga BBVA , el último partido del año.
En los primeros minutos de juego ya se notaba bien a que jugaba cada equipo. El local a defenderse, presionando mucho en la mitad de cancha e intentando de lastimar de contra. Por otro lado, el conjunto madridista tenía la pelota y jugaba por las bandas de la cancha, pero la marca férrea del Valencia no le permitía a Xabi Alonso y a Lucas Modric conectarse con los delanteros. El partido era más pensado que jugado.
El encuentro parecía no destrabarse, hasta que el argentino Di María, quien era titular por la lesión de Gareth Bale, demostraba que estaba a la altura de la situación luego de una gran jugada por el lado derecho que terminaba en un golazo que abría el marcador a favor del visitante.
Los blanquinegros no se iban a rendir tan fácil y poco a poco iban en busca del empate. Juan Bernat desborda y tira un buen centro que conecta de cabeza el pequeño y escurridizo Pablo Piatti anticipándose a Sergio Ramos y batiendo así la valla de Diego López poniendo el marcador en tablas.
Todo parecía mejorar para el local, pero el Real Madrid lo iba a amargar una vez más luego de que Di María, desde un saque de falta, ponga la pelota en la cabeza de Cristiano Ronaldo (en posición adelantada) y de esta manera los visitantes pasen una vez más a ganar el partido. Este golpe parece motivar a los jugadores blanquinegros que con buenas insinuaciones ofensivas se acercan al arco de Diego López, pero el primer tiempo terminaría en 2 a 1 a favor del visitante.
En la segunda parte, el Valencia salió a la cancha con intenciones ya no tan defensivas y más pensando en el empate. Piatti y Bernat volvieron locos a los defensores madridistas pero no lograron concretar las jugadas decisivas. En cambio el Real, ya más concentrado en la marca que en el juego, con poco, logra generar alguna que otra acción de peligro.
En un saque de esquina, Dani Parejo tira un centro que encuentra a Mathieu quien logra empatar el encuentro, evidenciando así, las deficiencias en balón parado del Madrid. Se hacía justicia en Mestalla.
Luego del empate el Valencia deleitaba a la afición con su juego e intenciones de ganar el partido, quizás el mejor partido de estos últimos meses para el olvido. Pero la alegría duraría poco ya que faltando ocho minutos para la finalización del encuentro, con una floja reacción de Guaita, Jesé Rodríguez convierte el gol que le daría la victoria al Real Madrid por 3 a 2. La mala fortuna se hacía gran protagonista.
Pese a la derrota el equipo mostró un buen juego, mucha actitud y los hinchas no se fueron tan disconformes a sus casas. Aun así el conjunto che sigue en la posición 11 de tabla con 20 puntos, a ocho de la zona de copas y a cinco del descenso.
Juan Antonio Pizzi cuando asuma al frente de este equipo tendrá mucho trabajo que hacer, pero si el equipo sigue con actuaciones como hoy, quizás el año que viene sea mejor que este presente.
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