EL ARTE DEL PICK & ROLL

Ninguna jugada de ningún deporte tiene tanta capacidad de generar juego como el bloqueo directo en el baloncesto.

La duda defensiva de si cambiar o no el defensor permite al atacante multitud de opciones para castigar al equipo contrario. Cuando el defensor cambia, el jugador que ha recibido el bloqueo puede penetrar o crearse un espacio para tirar o buscar la continuación del que ha bloqueado. Algunos jugadores han llevado esta jugada a su máximo exponente.

Stockton y Malone, la dupla que representaba a la perfección la jugada, fueron capaces de llegar a las finales los años 1997 y 1998, aunque sin éxito ante los Bulls de Jordan, Pippen y compañía. Stockton es el mayor asistente de la historia de la NBA y Malone el segundo máximo anotador. Mucha parte de la culpa de esto la tiene el pick & roll de los Jazz de los 97 y 98.

Los Suns de 2004 a 2012 contaban con otro mago del balón, Steve Nash. Gracias a su visión de juego y un genial bloqueo directo con Amare Stoudamire, la franquicia de Phoenix llegó a playoff siendo eliminados por unos Spurs que ganarían el anillo. No obstante, necesitaron de 7 partidos para poder detener la hemorragia de puntos que generaba la dupla con un simple bloque directo.

Los Grizzlies lo sufrieron y de qué manera en los pasados playoff. El causante de dicho sufrimiento fue el, quizás, mejor base actualmente en la liga, Chris Paul. Aprovechando su cambio de ritmo y técnica, un buen bloqueo de una de sus torres (Griffin o Jordan) y el ex de Hornets se creaba un espacio para asistir o penetrar a canasta. Este fue el motivo de la necesidad de 7 partidos para saber el ganador de la ronda.

Deron Williams y Carlos Boozer en Utah, Lebron James y Zydrunas Ilgauskas en los Cavs son otros de los ejemplos de como una jugada puede marcar una pareja de jugadores y conseguir éxitos para una franquicia.

Tan importante es la técnica y visión de juego del jugador que recibe el bloqueo, como la capacidad de leer la jugada del que lo realiza. Abrirse para tirar si se tiene buen porcentaje, acompañar al jugador si penetra para buscar el pase son las dos mejores opciones para hacer de una simple jugada, la clave de un partido.