El
Napoli venció, como visitante, 4 a 2 a la Lazio, con 2 goles de Gonzalo
Higuain, uno de Pandev y otro de Callejón. Mientras tanto, para el conjunto
romano, marcaron Behrami en contra y Keita. En el primer tiempo, los dos
equipos tuvieron la misma dificultad: armar situaciones de riesgo.
Si
bien el combinado napolitano controló más el esférico en varios pasajes de la
primera etapa, le costó elaborar llegadas peligrosas, debido a la falta de
justeza en el último pase. En cambio, la formación local, tuvo menos posesión
del balón, aunque creo posibilidades ofensivas. Sin embargo, estaba impreciso
en los últimos sectores del campo y por ello esas acciones no terminaban bien.
No
obstante, a pesar de esos errores en la elaboración y en la concreción de las
jugadas, a los 23 minutos, el Napoli abrió el marcador a través de Gonzalo
Higuain (quien armo una buena situación y definió con maestría de goleador).
No
pudo festejar el elenco visitante por un minuto después, a los 24, tras un
error involuntario por querer despejar el peligro, Behrami, en contra de su
valla, convirtió el empate para la Lazio. Luego de la igualdad, hasta el final
de la primera etapa, la falta de claridad y precisión volvió a aparecer en
escena.
Sin
embargo, como no hay mal que dure 100 años, en el complemento se observo un
encuentro emotivo por los diferentes tantos que hubo. A los 5 minutos, apareció
con todo su oficio, el volante Pandev, quien señalo el 2 a 1 para el combinado
napolitano.
Después
de la leve ventaja, el conjunto dirigido por “Rafa” Benítez controlo el balón
y elaboro diferentes opciones de riesgo. A los 26 minutos, por segunda
vez en la noche, Gonzalo Higuain, quería asegurar el marcador y convirtió el 3
a 1 para el Napoli, que había mejorado notablemente su producción.
Mientras
tanto, los locales, sintieron los dos impactos y por ello, dejaron espacios
libres en búsqueda del descuento. En algunos pasajes, la Lazio no pudo llegar
al segundo gol, debido a la seguridad que mantenía el portero Reyna en su arco.
Finalmente,
a los 42 minutos, Keita marcó el 3-2, pero parecía que todo ya estaba definido
ya que daba la sensación que al empate, el conjunto romano no podría
arribar. Además el cuarto gol que anoto Callejón para el Napoli, enterró
aun más la ilusión de la Lazio para llegar al empate.
Al
final, el equipo napolitano obtuvo una victoria clara y contundente, porque
cambió a tiempo su postura inicial. Fue inteligente a la hora de hilvanar las
situaciones y no desaprovechó las situaciones que tuvo. Por otra parte, el
local, fue agresivo jugando al contragolpe, pero dejo muchos espacios en el
fondo y lo pagó caro.
Por Diego Bentivegna
@bentidiego
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